«Siendo que en el músculo, incluyendo el miocardio, la síntesis de adenosina está limitada, estos tejidos aprovechan agradecidamente la suplencia exógena del mejor precursor inmediato de adenosina. Esto les facilita mantener la reserva de ADP necesaria para poder seguir aprovechando la fosforilación oxidativa.»
Dr. Luc Lemaire